viernes, 6 de febrero de 2009

NO a los viajes en el tiempo

Nos siguen llegando testimonios de ex-adictos a los viajes en el tiempo. Debemos decir que cuando subimos el últumo capítulo, JugHead, no nos esperábamos que lo más destacado de la blogosfera nos ayudara a difundir el mensaje, cual We Are The World del espacio-tiempo.

Veamos, pues, el sobrecogedor testimonio de Albert, un jovenzuelo que en su época tonteó con los viajes en el tiempo.

"Harto ya de tanta droga y tanto alcohol barato, necesitaba otras motivaciones. Probé el pegamento, el mate, Pilates, una reducción de estómago e incluso me saqué el título de instalador de calderas. Pero nada me motivaba suficiente y justo cuando estaba a punto de tirarlo todo, un amigo me propuso viajar en el tiempo. Nada me hacia mas ilusión. Me comentó que para viajar en el tiempo solo necesitaba un reloj, mi mente y el modelo 030 de Hacienda rellenado. El viaje en si es un subidón, es como cuando te pegan una patada en los huevos y el dolor ya se esta yendo y dices: “ahh! que gusto!”. Una vez has llegado a tu destino pasa a ser una patada en los huevos de la que ya no te recuperas nunca mas.

Yo soy un puto loser y mi viaje en el tiempo mas lejano fue al 1998, con toda la tontería del efecto 2000 por delante y con la peseta aún vigente. Solo llevaba 2€ en el bolsillo y como el euro aún no circulaba, en ninguna tienda me los aceptaban. Los bancos se me quitaban de encima con la excusa de que aún no se conocía a cuanto iba el cambio. “¡A 168.386!”, les gritaba yo, “¡6 euros son un talego!”, pero nada, ni puto caso. Así que me tuve que dedicar a robar, extorsionar, violar y pegar ancianas. Quería viajar en el tiempo para cambiar y la realidad me pegó una patada aún más fuerte en los morros. Robando conseguí 5000 pesetas de las cuales destiné 4000 a una camiseta del Barça con el nombre de Bogarde y las otras 1000 a buscar la forma de volver al presente. Lo conseguí gracias a un tarotista ciego que me pidió la voluntad y un paquete de pañuelos que robé a unos gitanos.

En el presente de nuevo, quería volver a probarlo. Esta vez al futuro. ¿Os he dicho que soy un loser? Fui al futuro, sí. Concretamente al día siguiente. Teniendo en cuenta que esto fue un martes, no tuve ni la ocasión de volver al presente para tirar la quiniela ganadora. Si me hubiera pasado en fin de semana… Por cierto, irme al día siguiente me resultó positivo por un solo motivo. Vi que un amigo me había etiquetado en el Facebook en una foto morreándome con una enana en una discoteca el día antes por la noche. Así que me aproveché, volví presente y sí, me morreé a la enana, pero antes le quité la cámara digital al amigo y aproveché para pegarle una buena paliza.

Y vosotros, queridos jóvenes, os preguntaréis, ¿qué has conseguido rompiendo el continuo espacio-tiempo? Nada. Bueno, sí… Una camiseta de Bogarde.

Yo de vosotros no lo intentaría, no merece la pena."

Podéis seguir envando vuestras histrias a info@postlost.net Si necesitáis inspiración, no olvidéis mirar el último capítulo de PostLost. Gritemos todos al unísono: ¡Engánchate al presente!

4 comentarios:

Bart dijo...

Collons, Albert, tu també? Buen testimonio. Espero que sirva de ejemplo.
Tu que lo has probado dime: ¿Es verdad que morrear una enana provoca arcadas pero sólo en un universo paralelo?

Anónimo dijo...

grande! creo que voy a dejar de viajar en el tiempo. me estáis aconjonando!

Miguel Ángel dijo...

Hostias!!! no sé como ni porque pero he estado en el pasado y ha sido algo horroroso.
Lo que recuerdo de mi viaje en el tiempo es que estaba atado de pies y manos en una cama, y recuerdo que entonces se abrió una puerta y apareció una mujer embutida en un traje negro de látex, cogió un látigo de un cajón y empezó a zurrarme de lo lindo durante un buen rato, me dejó hecho un cristo, después me cogió los pezones con los dedos y los empezó a retorcer, y dijo: "o me das leche o te los arranco", sabía que eso era imposible porque de donde no hay no se puede sacar, aun así puse todo mi empeño por complacerla y sobre todo por conservar mis dos tetillas. Lo último que recuerdo es tener la boca abierta gritando de dolor y que la cámara de video iba cerrando plano sobre mi persona hasta que al final se introdujo en mi boca. Los telespectadores de telecinco pudieron ver mi glotis toda inflamada.

tips de viajero dijo...

Interesante lo que comentas sobre los viajes en el tiempo no tenia conocimiento.

Saludos.